La inmigrante

Marie Curie (CC By 2.0 Tekniska museet)
Maria Salomea Skłodowska había nacido y crecido en una Polonia controlada por la Rusia zarista. Comenzó a estudiar ciencias en una universidad clandestina, porque su condición femenina le prohibía el acceso a centros oficiales. Pero llegó el momento en que, para continuar su formación, no tuvo más remedio que abandonar su país y emigrar a París, pasando a ser una de las 27 mujeres (frente a más de 700 hombres) matriculadas entonces en la Facultad de Ciencias. Se cuenta que tenía entonces tan escasos recursos que sufrió varios desmayos a causa del hambre.

En los inicios de su carrera científica conoció al que sería su compañero de investigaciones, Pierre Curie. Maria intentó volver a Polonia, pero su solicitud para trabajar en la Universidad Jaguelónica de Cracovia fue rechazada por ser mujer. Maria acabó por instalarse definitivamente en Francia, casándose con Pierre y siendo conocida desde entonces como Marie Curie, aunque nunca olvidó su país natal.

En 1903 la Academia de las Ciencias de Suecia quiso otorgar el Premio Nobel de Física, compartido con Henri Becquerel, a Pierre Curie por sus estudios sobre la radiactividad. A Marie se la quiso excluir del reconocimiento por tratarse de una mujer, pero Pierre se negó a aceptar el premio si no era compartido con su esposa, con la que había desarrollado toda la investigación. Así fue como Marie Curie se convirtió en la primera mujer en recibir un Premio Nobel.

Ocho años más tarde, en 1911, la Academia de Ciencias de Suecia le concedería el Premio Nobel de Química por el descubrimiento de los elementos radio y polonio, el aislamiento del radio y el estudio de la naturaleza y compuestos de dicho elemento. Pierre había muerto unos años antes atropellado por un coche de caballos. Se había convertido en la primera persona en ganar dos premios Nobel.

Durante la Primera Guerra Mundial Marie dedicó todos sus recursos a ayudar a su país de adopción, Francia. Incluso creó, con la ayuda de su hija Irène, un servicio de ambulancias equipadas con servicios de rayos X para asistir a los heridos en el frente. La propia Marie Curie estuvo trabajando en una de aquellas ambulancias, para lo que se convirtió en una de las primeras mujeres de Francia en conseguir un permiso de conducir. Se convirtió en la directora del Servicio de Radiología de la Cruz Roja francesa.

Tras la guerra continuó trabajando recibiendo reconocimientos allá donde iba, aunque también rechazo: nunca fue admitida, por ejemplo, por la Academia de Ciencias de Francia por tratarse de una mujer. Murió en 1934 de anemia aplásica, probablemente provocada por su exposición a la radiactividad. Un año más tarde, en 1935, su hija Irène continuaría la tradición familiar recibiendo otro Premio Nobel de Química. En 1995 sus restos mortales, junto a los de Pierre, fueron trasladados al Panteón de París, honor reservado a aquellos que han desempeñado un gran papel en la historia de Francia.

El elemento número 96 de la tabla periódica es conocido como "curio" (Cm) en reconocimiento a Marie y Pierre Curie.

Haz click aquí para descargar este post en pdf.

Salvo que se indique lo contrario los textos de este blog han sido publicados por Ángel Vázquez Hernández bajo Creative Commons Reconocimiento 3.0 España License. Puedes copiarlos y redistribuirlos siguiendo unas normas sencillas.



Comentarios

ESTE BLOG ES UNA ZONA SEGURA. En este blog se RESPETA a la persona en todo aspecto incluyendo su raza, origen étnico, sexo, identidad de género, expresión de género, orientación sexual, medio socio económico, edad, religión, y habilidad individual.

Entradas populares de este blog

Bienvenidos, bienvenidas

La mujer que abrió las puertas de la universidad

Calendario abril 2019

Blogs recomendados